18.11.07

PANFREDO Y EL PROYECTO IHVH

EL PROYECTO IHVH, EL LOGOS

“...Hace 15 mil millones de años, más un segundo”

Justo un instante antes de la Insigne Explosión, Panfredo se acerca al preciso paraje del recurrente medio del Aliento del Dragón y cerca del “Elemental”, descubre la imagen del código del Mundo, y esta imagen se manifestaba y era, gracias a instrucciones precisas que emergían de su centro y se resumirían, a última instancia, en tres misteriosos monogramas cifrados

I V HH

Tres códigos elementales y primordiales que gobernarían al Todo y también a la Nada.

Comprende que esa trisomía o tripleta estructural manifestada, se permutará irremediablemente en tres instrucciones básicas que, igualmente, desde siempre han estado siempre allí, en todo lugar, así, completas y preparadas, aguardando solemnemente su inexorable detonación, este sería el inicio virtual de la Ley de la Expansión, ejecutada mediante la Diseminación, manifestación aparentemente tonta pero profundamente esencial.

Panfredo comprendió que ésta instrucción trial, – la que denomina como: ThVRH, 55[1], – se expresará como n22, n a la veintidosava vez, además entendió, que al existir instrucciones estructurales inefables, también existirá algo o alguien que las domine o utilice, y será gracias al segundo código, al GV, a la conquista mitocondrial “de los unos encima de los otros”, contra los coetáneos, contra el prójimo, contra toda especie, así es como serán justificadas, esta relación se debe a la Ley de la atracción y a la entropía termonuclear.

I V hh

Esto determinará, que el guarismo de todo nuestro futuro, del todo en cierne, estuviese ya declarado, decidido, desde siempre, sin inicio y sin final, sin conocimiento aparente, sin sentido aparente, además, definirá una intencionabilidad, una concepción previa, una estructura metafísica que precisaré como: la secuencia VPCI-12, la voluntad del programa consustancial del impulso cuasi eterno; 888, instrucción elemental del Programa total y este es: Milah; el Proyecto ALHIM.[2]

Panfredo develará, en su peregrinación natural hacia las eras, hacia la metempsicosis permanente, los códigos revelados a través de su senda, y proveídos por los entes de siempre: la dualidad, la complementariedad y la singularidad, o sea, el ABC del proyecto.

Estos tres códigos se manifiestan en la secuencia 231, definiendo la primera Ley Cíclica, la de la Excepción.

LAS PRIMERAS LLAVES

Estos códigos deberán ser permutados en Palabras de Poder para la inscripción numerológica en pentáculos y talismanes.

V 3 y 2 a 1

En el inicio, – el que será bípedo, – desnudó lo elemental[3], descubrió la primera llave, la singularidad, la A[4], el Aleph, אלף, podía dividir al Todo o sea al Uno, primero en dos, luego y como genialidad en tres, ya que y para ello, debería primero volver al todo, seguidamente dividirlo en tres, descubriendo en su recorrido al uno dividido entre sí mismo y su mitad, así comprendería el concepto del ciclo, de la unidad y de la media, así se modelaría al mundo, al zodiaco y al genoma, al 1, al 3, al 12 y al 36[5], todos respecto al centro medio universal, el cual será irremisiblemente el 6, el dispositivo de simetría estructural y centro sincrónico relativo al Adam Panfredo, al que será el elegido por la luz autocontenida en su mismo socavón primordial.

Descubre que la primera llave es lo dual, ya que el dispositivo de espejo es virtualmente primario al Proyecto, se manifiesta como el sistema binario, 1110 0111, el sí y el no, dispositivo instructivo elemental para la diseminación.

Este dispositivo se expresa en la excepción primaria; el guarismo del 231[6], el cual se divide en dos espejos; el 1110 y el 0111, permutándose en sistema decimal en el 14 y en el 7, de los cuales resulta el 21, el número de la existencia, AHIH, además se reducen, en un tercer nivel, en el 5 más 7, en el 12 y de éste, al 3.

De esta forma se sintetiza el tres, el cual es puntual o linealmente el 111, la triada de triadas.

En el principio, el flagelado Panfredo era en el código del Buey, representando la imposibilidad de reproducción y evolución, afirmando la unidad virtual en el sacrificio como elemento primitivo de redención, era la locura del Proyecto, era el nacimiento del Uno. Este Uno será permutado por la Matriz en el Pentagramaton elemental o Macroprosopus, en su manifestación inicial; el código 3A-I38

Es el origen del Sacrificio Ritual del antropométrico y morfo y de la mutilación como iniciación.

El origen de la circuncisión como la revelación de la corona KThR la cual es Dios, el comienzo, 620, 53, , como pacto de la Alianza entre el Macroposopus, ShITh, 710, 23, 8, la ignición en 314, el circulo y el Microposopus, BRA, 203, 23, 5, la manifestación en 221 n dimensiones, la espiral en base 5

Codigos Corona

Envolvente prepusial a develar

Parámetros Alianza, sacrificio

Compresión y Diseminación

"He aquí mi pacto contigo: serás padre de una muchedumbre de pueblos, de los que saldrán reyes. Tú, de tu parte y tu descendencia, circuncidad a todo varón, circuncidad la carne de vuestro prepucio y ésa será la señal de mi pacto entre mí y vosotros. A los ocho días de edad será circuncidado todo varón entre vosotros, de generación en generación, tanto el nacido en casa como el comprado por dinero a cualquier extranjero que no sea de tu linaje".

Génesis, XVII

La segunda llave descifrada, era la sexta, la V, la Vau, VV, וו, la del iniciado y la de sí mismo, la Sequedadcita Cifra o protocolo palíndromo del Genoma V, entendiendo este formulismo como el ámbito del conjunto de instrucciones singulares resumida en una secuencia específica; SH, 65, para constituir un organismo cualquiera; una especie. Es el dispositivo formativo del mensaje informativo, equivaliéndose al módulo de repetición XX, su signo masónico[7]:

El genoma cósmico o universal, el masónico G-33, se refleja en toda criatura, este contiene el patrón sistémico, fiel y analógico de todo el sistema. Toda estructura elemental y toda actividad posible, poseen un diseño y éste se totaliza como el Atrio Central y Medular, el AChM/VI, o trono de Salomón, constitución existencial. Como es arriba, así es abajo.

Así como el núcleo de cada célula humana contiene 23 pares de cromosomas, los que a su vez comprenden 100.000 genes formados por 3 billones de pares de bases, el genoma Universal, contendrá las 22 instrucciones, más la fijación sexual del andrógino, secuencias nucleótidas especificas que hacen posible diferenciar a todo organismo posible y hacerlo único.

Así también, el código arameo se constituye de 22 signos elementales o arcanos mayores, más la singularidad del observado.

La Vau, la cual es la sexta posición en el protocolo inverso, es el clavo o dispositivo de la unión estructural. Es la pezuña del Proyecto.

Es la pasión del sacrificado

Este código V se funde con la O, el Oin, el ojo ciclobutivo del Proyecto, además de ser el Diablo tarótico XV, 15, ע, es el ojo del mundo, es semejante al 6 arameo ץ, dos puntas y una cola. La V o el Hierofante.

La tercera presea develada, era la décima, la llave I, la del Demiurgo y del anacoreta, la del Proyecto Dualista. Era lo secular negativo y lo positivo, la Matriz binaria de funcionamiento universal, era la dicotómica letra de Dios.

Será el Decálogo del Si y del No, y este imán biunívoco constituido de 2 pentagramas binarios e inversos, las variables 0 y 1, de ellos nos resulta; el 26, el Microprosopus, IHVH, el logos, entre KThR y IVD, este es el dispositivo del Macroprosopus

10101[8]= 21, 01010 = 10, todo 31, 11111, representando las 5 espadas del código gemátrico, las cuales significan el guarismo AL; Dios

– Esta es la historia de lo infinitamente grande que se refleja o sincroniza en lo infinitamente pequeño, en sus reglas y en sus intenciones. Es la historia del código mayor y su develación

Esta es la historia de esa singularidad. –

Día menos Uno

E

n aquel lugar mediático dentro del diafragma del Aliento del Gran Dragón, estaba en estado nagual la Matriz ontológica. La MO[9], la cual era similar a la estructura triádica del mensaje de las primeras y antiguas llaves develadas, la una y su inversa, luego, la triada y su versa, así, se define el ciclo, la novena y su bóveda.

Las del AVI o signo elemental, 1, 11, 1100, sin embargo el orden en este umbral, era de la secuencia 231, siempre compuesto de tres elementos indivisibles funcionalmente, era la instrucción IAO[10]. En este nivel primitivo, en este tiempo, reinaba la coherencia y no la locura, no la excepción.

De la instrucción IAO, se sintetizó; primero, el lugar virtual, el cual era el medio o espacio y a su vez, el tiempo, este era a la diestra de mi observación y a la siniestra de la Luz lejana, de la Segunda Esfera; la del Palacio de la I.

EL CÓDIGO II

La I es la unidad decimal y su duada, es la simetría y su inversa, este código devela al mellizo, como primer objetivo a observar, dentro de aquella marmulla existencial.

Este se estructuró como el serafín binario en la forma de Haruth[11], el mellizo menor y en tercer lugar se sintetizó el objeto u objetivo del proyecto, el Código Matricial en su manifestación, este en el Genio de la Dualidad, – dijo al Concejo de los 24 Ancianos, los cuales eran la Ley y la Teoría, era la Thorá. –

–Ya está atribuido el programa, – continuaba Haruth, – el cual concebía o percibía Panfredo, como un tipo alto, delgado e incoloro.

– Desde antes del antes, - a diferencia del absurdo, el Proyecto posee, ahora, la intencionabilidad requerida.

El proyecto, ya ha sido ajustado, y lo ha sido desde los Duques de Edón.[12]

– De manera clara y coherente, estableció el genio angelical el Primer Hipervínculo de Fondo o lo que denominó el mismo como el Presente Sincrónico Relativo. –

–.... Allí el ser relativo, su torno y su todo, se comulgarán en un acto de armonía, perpetuándose en la presencia sin tiempo y sin espacio, definiendo una instrucción elemental del diseño del Proyecto, de la Matriz, o fenomenología modeladora, más que como una imagen singular cuasi eterna, en su expresión, su reflejo, su semblante biunívoco. El programa era esencialmente el equilibrio de los opuestos mas uno-

La palindromía y el anagrama funcional definirían el presente sincrónico y se dispondría como el Dispositivo Principal de Diseminación y de Expansión.

El Observador, el cual era Panfredo, validó lo dicho por Haruth, en las notas siguientes:

* Las instrucciones funcionales, se ejecutan en apenas 22 arcanos mayores o Dispositivos formativos mitocondriales, además de 3 Códigos Padre o cardinales binarios.

* Todo estímulo o Medida de Manifestación, BIT[13], posee en nuestra cuarta dimensión, el valor sincrónico de 666[14]–, un valor sexual principal y primitivo, éste es básicamente el valor de la duada y de su inconsistencia, sean; XX, XY. Este código semitivo hacia el apareamiento, será reflejo preciso, verso, inverso y viceverso de la instrucción emanada por la Matriz Antigua, o sea, la de diseminar y la de expandir. La semejanza será, a la vez, una coherencia solutiva y evolutiva, pero siempre dual, para desembocar irremediable y nuevamente a lo inicial y andrógino y luego a la absoluta fragmentación.

* El primer código de inducción lo define Panfredo como la línea vertical coronada, línea que, constructivamente se manifiesta en su doble ponencia, (2n) expresamente; como el compás masónico. Su valor es 10, y su letra encierra 3 arcanos, su valor total es 20. es la I nombrada. Sobre este tema escribe uno de los ancianos,- el de la última fila de allá, hacia acá. – Es el solemne “moniéresis” lingüístico inmaculado.

Es el matriculado y es el circuncidado frente a la columna del Todo.

Las de Fenicia y las de Salomón.

Las de Jachim y Boaz

Las de la Afirmación y Confirmación

Las de la línea.

Las duales.

Existe una segunda existencia del primero y ésta es la de inversión de signo, la cual también será parte del tercer código.

* El segundo; el cruce, o punto singular en donde todo fluye y refluye a él, es el Aleph, la A, el ser, 0, 1, 111, y 30.

Es el principio del Pentáculo, del hexagrama y del tetragrama.

* El tercero es el Leviatán, el ojo acusador, la tentación y el error, es el ego y la generación, es la O, el 40, el 70, y el 61...el Oin y el Ain

Ψ

* Todo 90; definiendo la Estrella tarótica y el asterisco.

Siguiendo de forma intuitiva de este sendero helicoidal llegué al atrio de la sabiduría a la décima puerta del 121, y rezaba:

Luego ingresé, y al hacerlo los dos binarios de siempre Haruth y Maruth dijeron al unísono:

Este es el Secreto de la Puerta de la Iniciación.

La duada y el cruce.

Al inicio, el cual nunca fué, la dicotomía de la partícula y su antimateria, neciamente aniquilaban toda posibilidad de Ser, todo, en la medida de la destrucción y del colapso permanente.

De allí la Matriz dijo:

-“Ahora la simetría + n = - n, será (+n =-n)+1, en donde 1 es la singularidad alejada de la simetría primitiva.

– Se subrogará la I, del 10 a su duada, el 20[15], su reducción consecuente será, primero el uno, el Aleph, A, el Loco, α, y luego su duada, el 2, B, la Beth, , el Mago. De estos singulares remanifiesta en Assiah, el 10 y el 20

Se perpetuará en éste comando corporativo de tres unidades; como el Padre y en la triada final; A + B, en el 3 o código G, , al cual se le conocerá como el espíritu del Hijo por devenir o Estrella Singular.

Esa gran luz elemental se concretará en el llamado la ira del Proyecto; Miguel, MIKAL[16], el ángel de la luz y el portador de la espada flamígera, símbolo de destrucción y purificación.

Se conocerá también, como el código de diseminación del proyecto Alhim, cuyo valor será el 333, especificado en la secuencia ChVRVNZVN, 8-6-2-6-5-7-6-5, como raíz analógica de temura xxx en x posición de la Matriz ontológica.

El resultado de la I y la O, será el primero, 10 y 70 = 80, el 80 significa la Torre de Babel, y el postrero de los dispositivos a considerar, 26 o Jehová, será el del cruce, X, la A, el código que instruye a la dualidad a su compresión y síntesis en su punto relativo central, en el Aleph particular א, ésta fenomenología cruzada por 4 fuerzas que comprenden al LION[17]; a la fuerza, a la luz, a la oscuridad y a la muerte, éste simbolizado en el Aire y en el Mandala, como medio y como ser en su esencia y como el equilibrio de los opuestos.

En las espadas es como la explosión que produce al hijo, al producto y a su causa, al fenómeno de la existencia y el de la destrucción.

El tercer elemento era la O y/o la V, el contenedor, OIN, -El secreto está entre el abismo y la muerte.

El Santo Cáliz o Santo Grial, la amada representada por el movimiento serpentario del ideal, propio de nuestro código del AIN / ANI[18], analizado en la copa, en la sangre y en el semen procesado, en el medio líquido amniótico recurrente, en el útero y en la concha. El envoltorio que se permutará continuamente.

IAO, estos tres códigos básicos se repiten en toda frecuencia existencial, desde la semilla de la mostaza hasta la lejanía e inmensidad descomunal de la Andrómeda.

El Primer Código

Entonces, lo primero, en este primer nivel gnoseológico es la línea vertical, la I, será la energía, la Potencia implícita, representada por el Ermitaño Aislado, el portador de la luz, de la potencia factorial como dispositivo de toda expansión.

Lo segundo, lo cual también será lo primero y lo tercero, será el componente del cruce, del código que instruye a la dualidad, X, a su compresión y a su unión, a la síntesis necesaria en un punto central, en el Aleph, X, en el Aire y en las espadas, será el hijo el producto y causa del fenómeno de la existencia.

Se fundirá con el pentáculo, por su forma y contenido

Lo tercero, lo que también será lo primero y lo segundo, será la o, la s, la v o la t, será la amada, la serpiente, el diablo y el hierofante.

Estos 3 parámetros elementales definirán en su dualidad; a la O = 7 = Diablo / Dios, S = 6 = Serpiente / Humano, T = 9 = Cordero / León, a las primeras 6 instrucciones primitivas.

1. La singularidad, el yo, 1,30, 111 Aleph

2. La dualidad necesaria. 01, 2, 34, 412 Oin

3. La iniciación, las necesidades, los instintos, 110, 6, 12 Oin

4. El apareamiento, 111, 7, 31, 67 Aleph

5. El equilibrio, 1100, 11, 12, 3, 30, 29, 74 Ivd

6. Y la estrella u objetivo, 10010,18,90, 32, 104 Ivd


[1] ThVRH 55, La Thorá, se refiere probablemente a la instrucción 666, o sea, Th = 400 + V = 6 + R =200 + H = 5 + la constante de 10 = 55

[2] ALHIM, La palabra Elohim, אלהים, Dios, viene de la raíz judía singular femenina ALH, Eloy, palabra cuyo valor numerológico es 36, guarismo que significa la totalidad, el sufijo IM, determina el plural masculino, su valor es 50 o 23, cifra que significa la muerte o inestabilidad existencial, así, define el mismo Proyecto a Dios como la pluralidad andrógina de la singularidad, o muerte de la totalidad. El Anciano de los Días se ubica como diseñador de un proyecto al que Panfredo lo define como ALHIM, este se conforma a sí mismo como el Padre y como la Madre, y seguidamente; como el Hijo genérico y el de las especies, el signo de esta fenomenología genética se presenta en todos los seres, como la TEE-3, o la trinidad elemental y existencial compilada en la palabra BRA, primera de la Thorá y de la Biblia.

Panfredo define a la potencia existencial como un sistema coherente “producto” de un creador, pero a su vez, la creación pasa a ser parte de las propias posibilidades y probabilidades del artífice, convirtiéndose el mismo creador en su mismo proyecto, y este retroalimentará a lo otro, así, hasta siempre, hasta que el proyecto se vuelva independiente pero siempre estará determinado por los parámetros fundamentales del Todo, a estos determinantes clásicos, los cuales son 3, Panfredo los define como los códigos elementales de la Matriz, o las 3 letras Padre o Letras Perdidas; el 1 y el 0, más su conjunto y singularidad; el Aleph del ser y del no ser.

De ésto nace, que el dualismo sea la base epistemológica del Profeta Panfredo, a fin de descifrar la estructura universal, y conjuntamente definir su Teoría Poliuniversal del Todo.

[4] La numerología de Panfredo es basada en la cábala egipcia y hebrea. Por ejemplo el valor de las letras que conforman la palabra Aleph, ALP, posee el valor gemátrico de 111, ya que A = 1, L = 30, P = 80, todo 111. (N del T)

[5] Estos números en su adición resulta el 52, el número cabalístico del Hijo del Ser, del sistema decimal, al código binario, corresponden al 1, 11, 1100 y 100100, estableciendo claramente la lógica Panfriana en base dual, como base de diseminación en la Matriz del Proyecto. El 36 en particular es el numero constructivo, junto al 45 y al 81

[6] A la cifra 231 lo definen los estudiosos de la cábala como arcano de arcanos, ya que es la suma de las primeros 22 cartas del Tarot; A =(n2-n)/2+ n. La cifra 231 en código binario es 1 1 1 0 0 1 1 1. triada duada triada duada

[7] Panfredo utiliza el término masónico, como el G-33, el cual lo define como el Código Constructivo Primitivo, o código חחף, III-ChChP –que en su revelación– se descubre su vínculo semiótico como Salomón, y éste resumido en conocimiento, en síntesis estructural y, obviamente, en signo y símbolo, para definir y gráficamente en un obturador temporal de las instrucciones y funciones especificas de todo mensaje e impulso informático de la Matriz Panfriana.

[8] sistema binario o posicional en base dual, así:

20 = 1, 21 =2, 22= 4, 23= 8, 24= 16....

[9] MO, las letras del tiempo, M = 40, días, años, O = 70,7, días, palacios, planetas, pecados, plagas, gradas, cielos, vueltas, son los números del tiempo y del espacio.

[10] El IAO es la palabra sagrada de los gnósticos la cual significa la trinidad elemental. se le considera el nombre bárbaro de la Evocación y para los magos su poder es inefable, es el pilar central, el pentagrama y la nada. (N.del T.)

[11] Haruth es en el Talmud uno de los dos mellizos, genios demoníacos, Haruth y Maruth, que simbolizan la dualidad como potencia elemental del ser, sobre estos personajes se profundizará más adelante. (N.del T.)

[12] En la cábala, los duques de Edón, o Esaú, el cual es mellizo de Israel o Jacobo, representan la polaridad elemental, además, se refiere a los mundos inestables Edonitas antes de los Reyes Israelitas, precisamente se establece el instinto o gen de dominación, como el primer elemento de configuración del Panfredo QDMVN, la bipolaridad GV.

[13] Bit, en código Symeteo, (N. de T.)

[14] 666, se entiende aquí como el número de la frecuencia y dimensión Panfriana del diseño formativo del ADM QVDMN o Prototipo humano de acuerdo al dogma cabalista. (N. del T).

[15] El valor gemátrico de la letra I, es 10, y ella devela el dualismo en su valor, IVD, Yod, יוד, su valor es 20, pero a diferencia de las letras duales HH, 5, 10 o VV, 6, 12, ésta anterior contiene 3 elementos, los cuales son IVD, similar a la SMK, Samek, la cual es el báculo central, 15, 30, determinando de alguna forma la secuencia 20, 30, 40, como base consustancial al misterio de las progresiones cromosomáticas. IAO, para Panfredo, es la pista a seguir, 234.

[16] MIKAL, en gematría los valores de cada letra de su nombre suma 101 y significa M = elegido = 40, I = luz = 10, K = función =20, A L = 31= Dios, o sea el elegido de Dios que soporta la luz.

[17] Se refiere a las letras del alfabeto hebreo dentro del árbol de la vida cabalístico, estas letras suman cada par 26, el cual es el número de IHVH, Javé, en el medio descansa el Aleph, protegido por la torre y el sol y estos por el universo, se entiende el guarismo como LION, el león de Babilonia, LMD, NVN, y IVD, OIN, de su sumatoria cabalística resulta el 33, LG, el ungido.

[18] AIN ANI, significa en hebreo, la nada y el ser, su valor gemátrico es A=1, N=50, I=10; todo 61.

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